Fue a través de un trabajo coordinado de efectivos de la Comisaría jurisdiccional y la zona 1 del Comando Radioeléctrico Policial
La fuerza provincial detectó una fiesta privada que se desarrolló en un salón, donde se cobraba entrada para ingresar, con la presencia de menores y bebidas alcohólicas.
Se requirió inspectores de Bromatología Municipal, quienes realizaron el Acta de Infracción y clausura del evento.
Alrededor de las 01:30 horas de este sábado, los efectivos tomaron conocimiento que en un salón ubicado sobre calle Belgrano y Polonia Enciso del barrio Bernardino
Rivadavia de esta ciudad, se llevaba a cabo una fiesta con venta de entradas e ingreso de conservadoras con bebidas alcohólicas.
Ante la situación, los uniformados llegaron al salón, constataron el desarrollo de la fiesta privada con la presencia de 200 personas aproximadamente, donde se entrevistaron con el encargado, quien exhibió una autorización y refirió que desconocía sobre el cobro de entradas a los concurrentes.
Posteriormente solicitaron la presencia de los inspectores de la Dirección de Bromatología de la Municipalidad, quienes determinaron que el permiso otorgado al propietario del local era para la realización de un cumpleaños y para actividad que se estaba desarrollando.
A través de los invitados, también se pudo saber que para ingresar tenían que abonar entradas a las organizadoras del evento, quienes previamente promocionaban la fiesta como “Black Party” a través de redes sociales y WhatsApp.
En virtud a que en el lugar se desarrollaba una actividad distinta al permiso requerido, Bromatología labró el Acta de Infracción y procedió a la clausura del lugar colocando fajas de seguridad.
Se realizó el despeje de las personas que se hallaban en el sector y además secuestraron bebidas alcohólicas que se encontraban en las conservadoras de los invitados.