El viceministro de Ambiente de la Nación, Sergio Federovisky, estuvo en la provincia junto al gobernador, Gustavo Melella. Hay disgusto por la tardía reacción para combatir los focos.
La provincia de Tierra del Fuego se encuentra envuelta en un halo de incertidumbre y preocupación desde fines de noviembre, cuando se notificó de un incendio forestal en las cercanías de Tolhuin, la ciudad que se encuentra en el corazón de la isla.
A partir de allí, la situación fue cada vez más descontrolada debido a la falta de reacción del Gobierno de Gustavo Melella para tomar las medidas necesarias.
Diego Almaraz, un bombero voluntario de la ciudad de Río Grande, le había explicado a Noticias Argentinas que la tardía reacción del Gobierno fue un factor clave en el descontrol que se generó: “Ahora hay dos aviones hidrantes trabajando y helicópteros que trabajaron bastante, pero la ayuda llega de manera tardía, cuando se quemaron muchas hectáreas”.
“Si esto se atacaba desde el principio, seguramente el daño no hubiese sido tanto. A veces la poca información o la poca preocupación de las autoridades hacen que estas cosas no puedan ser controladas a tiempo”, continuó.
Por otra parte, Iván Uriona, un voluntario que se ofreció junto a un gran número de personas para dar una mano, se lamentó: “En el Gobierno pusieron trabas porque desde un principio no querían dejar pasar las donaciones”.
Recién casi tres semanas después del comienzo del incendio, el viceministro de Ambiente de la Nación, Sergio Federovisky, pasó por la zona para ver la gravedad de la situación. De todas maneras, contó que “ofrecimos la incorporación de otros 20 brigadistas que seguramente estarán llegando el fin de semana. Tenemos también medios aéreos en reserva para el caso de que fuese necesario”.
A lo largo de los últimos años, la cartera dirigida por Juan Cabandié fue duramente criticada por la falta de eficacia frente a incendios de esta magnitud.
Pero la realidad es que la ayuda llega luego de que se incendien aproximadamente 7.500 hectáreas y de que varios ciudadanos tuviesen que ayudar para evitar que el fuego llegue a Tolhuin, ya que llegó a acercarse a menos de dos kilómetros.
Más críticas por otro incendio en Corrientes
En el verano de 2022, la provincia de Corrientes sufrió la quema de más del 12% de su superficcie total y hay preocupación por la aparición de nuevos focos por las altas temperaturas y la sequía.
Es por esto que el gobernador de Corrientes, Gustavo Valdés, recibió duras críticas por la falta de previsión y presupuesto para encarar lo que vaticinan como una catástrofe ambiental.