Susana Giménez realizó una publicación en su cuenta oficial de Instagram, luego de recibir el alta tras someterse a una intervención quirúrgica en su codo izquierdo.
La diva, que a fines de mayo había viajado a Uruguay para instalarse en La Mary, su chacra en Punta del Este, había regresado al país por un inesperado suceso: con su perra Rita en brazos, tropezó en las escaleras de su casa y sufrió un fuerte golpe en un brazo. Si bien recibió una primera atención en un sanatorio de Maldonado, las secuelas del golpe resultaron tan complicadas que Susana debió volver a la Argentina para operarse. No había pasado ni siquiera una semana de su arribo al país vecino.
Así, el jueves pasado fue intervenida en el Sanatorio Otamendi por el doctor Alejandro Druetto, su traumatólogo de confianza, que esa misma tarde le dio el alta para seguir con la recuperación en su domicilio de Barrio Parque.
“Se realizó con éxito la reducción de la luxación del radio en su codo izquierdo, y se evalúa la inestabilidad. La zona quedó inmovilizada con una calva de yeso plástico, lo que sería medio yeso. Y Susana deberá hacer fisioterapia intensiva durante cuatro semanas, en su domicilio”, informó en ese momento Druetto, en diálogo con Teleshow.
Ahora, desde la paz de su hogar, la diva llevó tranquilidad para sus afectos y seguidores en las redes. “Gracias a todos los que llaman preocupados por saber cómo estoy y me mandan flores y saludos por mi operación. Ya estoy en casa, sin yeso pero cuidándome mucho el codo”, expresó.
“Aunque sigo un poco molesta estoy muchísimo mejor, me esperan varias sesiones de rehabilitación, poco a poco espero volver a mi vida normal (o lo que ahora se pueda considerar normal). Besos!”, completó la conductora, en alusión al atípico contexto derivado de la pandemia de coronavirus y el aislamiento que rige en territorio argentino.
¿Cómo llegó exactamente a esta publicación la estrella de la TV argentina? Una tarde, Giménez subió las escaleras de su casa en pantuflas, cargando a la perra en brazos. En un momento Rita se movió bruscamente queriendo soltarse, lo que hizo que la conductora, para tratar de atajarla y que la perra no se vaya rodando por las escaleras, se tambaleara y se cayera ella. Esto provocó que la llevaran de urgencia al Sanatorio Cantegril. Horas más tardes, el director de ese centro de salud uruguayo, Elbio Paolillo, confirmó que había sufrido una luxación.
Finalmente, quien llevó adelante la intervención en Argentina es el mismo profesional que hace casi 10 años le realizó el trasplante de sus caderas por prótesis diseñadas exclusivamente para ella. Primero se llevó adelante el reemplazo de la izquierda y unos días después, se hizo lo propio con el hueso derecho. En aquel entonces, también producto de un dolor intenso que prácticamente no la dejaba caminar, tomó la decisión de dar ese paso. El exitoso resultado hizo que ella depositara toda su confianza en él una vez más.
Superada la operación, el jueves pasado poco antes de las 5 de la tarde, Susana salió de la clínica y se subió a su auto particular. Las imágenes fueron captadas por las cámaras de Fantino a la Tarde, por América. Y, ante la insistencia del cronista Rafa Juri, la diva bajó la ventanilla y contó que todavía estaba “medio dormida” por la anestesia, pero se mostró de buen humor.
Sabiendo que es casi imposible que regrese a la pantalla este año y que ahora le sumó la necesidad de dedicarle un tiempo a la recuperación de su codo izquierdo, la diva permanecerá en su casa de Barrio Parque, al menos en el corto plazo.
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