San Lorenzo, con el esperado retorno de los hermanos Ángel y Óscar Romero, volvió este viernes a entrenar en su Ciudad Deportiva del barrio porteño de Bajo Flores tras 179 días, entre el receso por la pandemia de coronavirus y las prácticas en el predio de AFA en Ezeiza.
La dupla paraguaya se hizo presente luego de protagonizar una demorada vuelta desde su país, donde estuvieron entrenando con la selección local, y tras las dos semanas obligatorias de cuarentena.
Mientras tanto, el grupo realizó tareas físicas sin la presencia del DT Mariano Soso y los jugadores Nicolás Fernández, Alexander Díaz y Francisco Rivadeneira, los cuatro integrantes de la delegación que actualmente están cumpliendo el aislamiento tras resultar positivos por covid-19 en los últimos días.
Así las cosas, los auxiliares Diego Buján, Martin Wainer y Nicolás Domínguez dirigieron la práctica, supervisados de manera remota por Soso. En la cancha auxiliar de la Ciudad Deportiva, el plantel llevó a cabo “trabajos preventivos de fuerza, circuito de fuerza funcional, tareas conceptuales ofensivas y defensivas con balón, y rutinas en defensa y ataque”, según informó el departamento de prensa del club.
Lucas Menossi, quien fue hisopado el jueves y tuvo resultado negativo en coronavirus, trabajó a la par de sus compañeros, mientras que los arqueros Sebastián Torrico, Fernando Monetti y Lautaro López cumplieron tareas técnicas del puesto junto a Juan Carlos Docabo.
El Ciclón volverá a entrenarse este sábado por la mañana, para seguir la puesta a punto a la espera de saber cuándo y de qué forma se reanudará el torneo oficial de la Liga Profesional.