Ocurrió en la Comisaría Tercera, donde a través de una exhaustiva y rigurosa requisa de rutina, la Policía detectó que entre los alimentos había 54 psicofármacos.
El hecho ocurrió el miércoles último en horas del mediodía, en la guardia de prevención de la Comisaría Seccional Tercera ubicada en el barrio San Miguel de esta ciudad.
Según el protocolo de seguridad, los efectivos en forma conjunta con Cadetes de Policía de Tercer año que cumplen sus prácticas profesionalizantes, realizaron la requisa en los objetos que pretendía entregar a su familiar, detectando dentro de una bandeja de fiambres cortados en trozos, varios psicofármacos de color celeste y otros color blanco.
Se solicitó colaboración al personal de la Dirección General de Drogas Peligrosas, quienes secuestraron un total de 54 psicofármacos.
Una vez finalizada las diligencias, al sujeto se le notifico situación procesal y quedó detenido y alojado en celdas de esa unidad operativa a disposición del Juzgado de Instrucción y Correccional contra el Narcocrimen.