En el marco investigativo de una causa judicial por incidentes en el barrio Lote Rural 111 de esta ciudad, efectivos de la Policía provincial realizaron dos allanamientos y aprehendieron a ocho personas y secuestraron un arma de fuego de fabricación casera (tumbera), cartuchos, elementos contundentes, armas blancas y dos plantines de marihuana.
Los allanamientos se concretaron como parte de una causa judicial por delitos de “Intimidación publica en poblado y en banda agravada por la participación de menores, lesiones leves con el uso de arma de fuego e infracción al artículo 189 Bis del Código Penal Argentino”, con intervención del Juzgado de Instrucción y Correccional N° 6 de la Primera Circunscripción Judicial de la Provincia.
Tras una exhaustiva labor investigativa llevada adelante por la Policía, solicitaron la orden de allanamiento al magistrado interviniente para dos inmuebles ubicados en el barrio de mención de lograr el esclarecimiento del hecho y dejar tranquilos a los vecinos de los revoltosos.
Con orden judicial, se requisaron dos domicilios de las manzanas 26 y 37 del Lote Rural 111. A las 7:15 horas del sábado, los efectivos de la Subcomisaria Lote 111 y la colaboración de otras dependencias policiales del área Unidad Regional Uno, una Sección del Destacamento Desplazamiento Rápido, Departamento Informaciones Policiales y Dirección General de Drogas Peligrosas dieron cumplimiento a la medida judicial dispuestas por el magistrado.
Durante los allanamientos se detuvo a seis personas mayores de edad y se retuvo a dos menores, más el secuestro de un arma de fabricación casera “tumbera”, proyectiles de arma de fuego, armas blancas y una diversidad de objetos contundentes que utilizaron en las egresiones durante el incidentes.
Además encontraron dos plantines sometidos a las comprobaciones químicas por el personal de narcóticos, que arrojaron resultado positivo para marihuana.
Detenidos, retenidos y todos los elementos secuestrados fueron trasladados hasta la sede policial, donde se notificó a los mayores de edad de su situación procesal y quedaron alojados en celdas de las unidades operativas, a disposición de la justicia.
Según el protocolo de intervención, los menores fueron entregados a sus padres en carácter de guarda tutelar.